Desde Zimpizahua
¡En Coatepec ‘Juan Pueblo’ se murió!
Por Joaquín Alcántara Hernández
EN COATEPEC, ‘JUAN PUEBLO’ SE MURIÓ
Tierra abundante Coatepec
De arquitectura colonial
Te titulaban capital
Digna mundial del café.
Hoy te has muerto esperando
El progreso prometido
Mas de este mundo te has ido
Sin la gloria merecida
Con un estado endeudado
Y su pueblo defraudado.
Esto era de esperarse
De quienes son usurpadores
Veracruz está madreado
Por todos los saqueadores.
Pero hoy se murió ‘Juan Pueblo’
Se murió muy ofendido
El jamás tuvo remedio
Su ignorancia lo ha vencido
Siempre estuvo agonizante
Él tenía una esperanza
Que despertara su gente
Pero todo fue una farsa
En su fúnebre olvido
Despedirse hoy él quiere
Y pidió un recorrido
Desahogarse el prefiere
Por las calles va avanzando
Su ataúd gris y sin suerte
Va su llanto derramando
Por más que se haga fuerte
Su fervor fue impaciente
Su actitud muy opacada
A ver si alguien lo desmiente
Pero nadie dice nada
En su primer recorrido
Vio en el rostro de la gente
Desolación y olvido
Aunque ‘tuviera’ presidente
Siempre impregnados de luto
Como una maldición gitana
Todos pierden, nadie gana
Ni una obra en absoluto.
Pónganme frente al palacio
Daré un grito espeluznante
Mientras sigan con su adagio
Y con gente arrogante
El mal gobierno seguirá
Progreso fatuo fingido
Al pueblo someterá
Pero eso ha elegido
Largo es mi funeral
Voy a hacer cuerpo presente
Donde el destino es fatal
Y sin futuro, mi gente
Gritaré a los usureros
La injusticia que cometen
Ellos son sepultureros
A familias las someten
Sé que hay necesidad
Ojalá que alguien corrija
Trabajar con dignidad
Y que el pueblo, eso elija
Yo no quiero un velatorio
Quiero que me oiga mi gente
Llévenme al auditorio
Ojalá nadie les cuente
Veo un pueblo apocado
Ya es hora que despierten
Un gobierno empantanado
Los políticos les mienten
Enterraran hoy mi paciencia
Ustedes siguen permitiendo
Su pecado es la ignorancia
La pobreza está creciendo
Ustedes cargan a la muerte
A Coatepec no defienden
No quieren cambiar su suerte
¡Se los grito y no me entienden!
Los niños en la escuela
Acuden con ilusión
Qué destino les espera
Pues aquí, no hay opción.
El dinero acumulado
Siempre en las mismas manos
Y el pueblo desolado
Sólo engorda a sus marranos.
Todos mueren de apatía
Todos se quedan callados
Toda la gente hoy vivía
Con los rostros derrotados
Coatepecanos han pasado
Por las cumbres del poder
Sin embargo Coatepec
No tiene qué agradecer
Por el contrario ¡Son ellos!
Los que imponen sus caprichos
Que resultan unos bichos
Y la muerte va contenta
Con sonora carcajada
Se los cargó la chingada.
(Allá los espero, ¡utos!, “Juan Pueblo”)
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